Tabla de contenido:

4 Trastornos Del Sueño En Perros
4 Trastornos Del Sueño En Perros

Video: 4 Trastornos Del Sueño En Perros

Video: 4 Trastornos Del Sueño En Perros
Video: Perro privado de sueño tiene una pesadilla cada noche | Animal en crisis EP46 2024, Diciembre
Anonim

por JoAnna Pendergrass, DVM

El perro adulto promedio duerme de 12 a 14 horas al día a través de una combinación de siestas durante el día y sueño nocturno. Al igual que en las personas, el sueño es clave para la salud general de un perro. También ayuda al perro a sentirse más descansado y con más energía.

Los perros con trastornos del sueño pueden quejarse, llorar o despertarse con frecuencia durante la noche, volverse más lentos durante el día o parecer más desorientados cuando realizan tareas normales. Debido a que la falta de sueño puede causar una acumulación de hormonas del estrés, los perros con trastornos del sueño también pueden volverse más agresivos o desarrollar otros problemas de comportamiento. Además, la falta de sueño puede debilitar el sistema inmunológico de un perro, aumentando el riesgo de infección.

Aquí hay cuatro tipos comunes de trastornos del sueño que pueden ocurrir en perros y cómo tratarlos:

Narcolepsia

La narcolepsia es un trastorno del sueño del sistema nervioso que afecta principalmente a los perros jóvenes. Es comúnmente causada por un trastorno genético que conduce a niveles anormalmente bajos de una sustancia química llamada hipocretina, que ayuda a mantener el estado de alerta y los patrones de sueño normales. Este trastorno genético puede afectar a Doberman Pinschers, Poodles y Labrador Retrievers. Otras causas de la narcolepsia incluyen obesidad, inactividad y disfunción del sistema inmunológico. A veces la causa es desconocida.

Un perro con narcolepsia colapsará repentinamente de costado y se quedará dormido, generalmente después de un período de excitación o actividad física (como comer, jugar, saludar a miembros de la familia, etc.). Los músculos se aflojarán y el perro parecerá estar en un sueño profundo con movimientos oculares rápidos (sueño REM). La estimulación externa, como ruidos fuertes o caricias, despertará abruptamente al perro. La narcolepsia a veces se asocia con cataplejía, que es parálisis muscular.

La narcolepsia no pone en peligro la vida ni es dolorosa. Se diagnostica en función de los signos clínicos, por lo que grabar un video de un episodio narcoléptico puede ayudar al veterinario a diagnosticar con precisión este trastorno.

La narcolepsia no es curable, pero puede manejarse identificando y minimizando los eventos que la desencadenan. El uso de palabras reconfortantes y caricias suaves también puede ayudar a disminuir la gravedad y la duración de los episodios narcolépticos de un perro. Dependiendo de cuánto la narcolepsia esté afectando negativamente la calidad de vida de un perro, un veterinario puede recetar medicamentos que reducen la hiperactividad, estimulan la vigilia o controlan la frecuencia y duración de la narcolepsia.

Insomnio

El insomnio es raro en los perros y generalmente indica otro problema de salud. Puede ser causada por problemas de salud física que son dolorosos (como artritis o una lesión), pican (como pulgas) o causan micción frecuente (como enfermedad renal o diabetes). La ansiedad, el estrés y la energía acumulada también pueden provocar insomnio. En los perros mayores, especialmente, la disfunción cognitiva, que es causada por la degeneración del cerebro, puede alterar los patrones normales de sueño y causar insomnio.

Un veterinario podrá determinar el problema subyacente y prescribir el tratamiento adecuado. Por ejemplo, los analgésicos pueden aliviar el dolor relacionado con la artritis, lo que conduce a un sueño mejor y más cómodo. La acupuntura puede mejorar el sueño aliviando el dolor y la ansiedad y puede incluso la función renal. Para los perros mayores con disfunción cognitiva, las dietas ricas en ácidos grasos omega-3 pueden mejorar la función cerebral y la melatonina puede regular el ciclo de sueño-vigilia, los cuales contribuyen a dormir mejor.

Otras estrategias para aliviar el insomnio incluyen aumentar la actividad física durante el día, programar el tiempo de juego antes de acostarse, hacer que el área para dormir sea más cómoda (comprar una cama ortopédica para un perro artrítico, por ejemplo) y usar aromaterapia con lavanda y manzanilla en el área del sueño.

Apnea del sueño

La apnea del sueño es generalmente rara en perros. Sin embargo, es común en perros obesos y razas de cara plana como Bulldogs ingleses, Boston Terriers y Pugs. Con la apnea del sueño, la grasa interna excesiva o la anatomía respiratoria anormal pueden colapsar temporalmente o estrechar las vías respiratorias, lo que hace que un perro se despierte de 10 a 20 segundos a la vez. Estas constantes interrupciones del sueño pueden hacer que un perro se sienta cansado y perezoso durante el día. Los ronquidos fuertes y crónicos son un signo común de apnea del sueño. Las opciones de tratamiento incluyen pérdida de peso para perros obesos, cirugía y humidificadores de vapor.

La apnea del sueño no tratada puede poner en peligro la vida. Si su perro ronca fuerte y se despierta constantemente durante la noche, busque tratamiento veterinario lo antes posible.

Trastorno de conducta REM

¿Tu perro está persiguiendo a una ardilla mientras duerme? Si es así, puede tener lo que se llama trastorno de conducta REM, que provoca actividad física durante el sueño. Para algunos perros, esta actividad puede volverse extrema o violenta, como chocar contra paredes o atacar objetos inanimados. Los perros con trastorno de conducta REM se despertarán normalmente sin confusión ni desorientación, lo que hace que este trastorno sea diferente de una convulsión. El tratamiento con un medicamento llamado clonazepam reducirá la actividad física durante el sueño.

Si nota algún cambio en los hábitos de sueño normales de su perro, llévelo a su veterinario lo antes posible. No intente diagnosticar o controlar el trastorno del sueño por su cuenta, ya que esto podría prolongar la mala calidad del sueño de su perro.

Durante la cita, su veterinario primero realizará un examen físico y luego realizará otras pruebas según sea necesario para diagnosticar el trastorno del sueño de su perro. Una vez que el trastorno se haya diagnosticado correctamente, trabaje con su veterinario para elaborar un plan de tratamiento que controle eficazmente el trastorno y ayude a su perro a dormir mejor.

Recomendado: