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Cáncer De Tiroides (adenocarcinoma) En Gatos
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Video: Cáncer De Tiroides (adenocarcinoma) En Gatos

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Anonim

Adenocarcinoma de glándula tiroides en gatos

La importancia de la glándula tiroides es múltiple. Es responsable de una variedad de funciones corporales, sobre todo la coordinación de hormonas y el metabolismo normal. El adenocarcinoma de la glándula tiroides es como otros adenocarcinomas: crece rápidamente y puede hacer metástasis a otras partes del cuerpo. El adenocarcinoma de tiroides se observa con mayor frecuencia en gatos mayores, pero los gatos jóvenes también pueden padecer esta neoplasia.

También se sospecha que el elemento yodo juega un papel en la disfunción de la glándula tioides. Debido a que el yodo es esencial para que la tiroides funcione correctamente, los gatos que viven en áreas con deficiencia de yodo pueden tener un mayor riesgo de desarrollar estas neoplasias.

Síntomas y tipos

A continuación se enumeran algunos de los síntomas comúnmente relacionados con el adenocarcinoma de tiroides.

  • Gran masa fija o móvil sobre la tráquea del gato que cubre la laringe
  • Disnea (dificultad para respirar)
  • Disfagia (dificultad para tragar)
  • Pérdida de peso
  • Disfonía (ronquera)
  • Polidipsia (aumento de la sed)
  • Poliuria (aumento de la cantidad y / o frecuencia de orinar)

Causas

La causa del adenocarcinoma de tiroides aún se desconoce.

Diagnóstico

Su veterinario realizará un examen físico completo en su gato, con análisis de sangre, perfil bioquímico y análisis de orina. Deberá proporcionar un historial completo de la salud de su gato y la aparición de los síntomas. La prueba más informativa y útil es la determinación de la concentración de T4 (tiroxina) y / o T4 libre. La tiroxina es una hormona primaria producida por la glándula tiroides. Su nivel tiende a aumentar en algunos pacientes con adenocarcinoma de la glándula tiroides. También se determinarán los niveles de hormona estimulante de la tiroides (TSH), junto con la T4. La TSH es otra hormona liberada por el cerebro que controla la liberación de la hormona T4. Las imágenes de rayos X y ultrasonido, la tomografía computarizada (TC) y la imagen por resonancia magnética (IRM) son algunas de las herramientas de diagnóstico que su veterinario puede usar para confirmar el diagnóstico y determinar si el tumor ha hecho metástasis. Su veterinario también puede realizar una biopsia del tejido tiroideo para ver si hay células malignas presentes en la glándula tiroides.

Tratamiento

Aún no existe un tratamiento curativo disponible para esta neoplasia de la glándula tiroides en los gatos. La cirugía se puede emplear para la extirpación parcial o completa de la glándula tiroides, junto con el tejido neoplásico. Como esta área tiene un riego sanguíneo extenso, es posible que ocurra una hemorragia durante la cirugía, lo que requiere una transfusión de sangre al paciente. Otros protocolos utilizados para el tratamiento de un adenocarcinoma de la glándula tiroides incluyen radioterapia y quimioterapia. Si se extirpa la glándula tiroides, su veterinario puede recetarle el suplemento de yodo, tiroxina, para administrarlo por vía oral a su gato para mantener otras funciones corporales que dependen de la tiroxina. Se administrará un suplemento de tiroxina durante toda la vida de su gato.

Vida y gestión

Se debe alentar a los gatos que han sido tratados por adenocarcinoma de tiroides a que descansen si la actividad les causa problemas respiratorios. En la medida de lo posible, mantenga a su gato en un entorno de bajo estrés. La frecuencia cardíaca en estos pacientes tiende a fluctuar, por lo que su gato puede sufrir un colapso inesperado en cualquier momento. Comuníquese con su veterinario inmediatamente en tal situación. Siga las pautas de tratamiento de su veterinario, especialmente al administrar los agentes quimioterapéuticos en casa. Muchos agentes quimioterapéuticos pueden ser peligrosos para su salud si no se manejan adecuadamente, consulte con su veterinario sobre las mejores prácticas de manejo.

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